Lo admito, odio a ese jodido jefe, lo odio con toda mi alma. Estoy empezando a pensar que me tiene manía persecutoria o que soy gafe, da igual, a partes iguales, le tengo manía y él a mi y no tiene más.
Por eso en este post descargaré todas mis ansias asesinas explicándoos como podéis sacarle más partido a vuestro sacerdote sanador en este jefe.
Para empezar, ese jodio largarto, condenado, como lo odiamos todo el gremio de healers, nos da un bonito regalo: regeneración de maná 0. Sí, 0, y 0 es cero. Olvidáos de tonterías de pociones de maná y de malignos de sombras, ni pidáis estimular, porque nada, 0. Lo único que funciona son habilidades de DPS que a nosotros ni nos vienen ni nos van, porque no nos afectan.
¿Y cómo podemos hacer para enfrentarnos a él?
Es evidente que este jefe puede hacerse con talentos de disciplina o talentos de sagrado, es indiferente, pero recomiendo para aquellos que estén empezando o quieran guardar maná por algún motivo que hagan el jefe en modo disciplina. Además, debéis llevar puesto el equipo que os dé más intelecto.
Tenéis que tener en cuenta que en este jefe prácticamente sólo hay que sanar al tanque y en contadas ocasiones, así que a parte del maná, yo recomiendo el crítico en este jefe, ya que la celeridad aquí no hará nada ya que se trata de que se tenga la sanación preparada para entrar en el momento que el tanque reciba el daño.
Unido al tema del maná, tenéis la posibilidad de usar para este jefe el Frasco de Sabiduría destilada o el elixir de pensamientos fluidos junto al que decidáis - uno que dé crítico o poder de hechizos es una buena combinación con el elixir de intelecto. De comida recomiendo la medusa picante, ya que da crítico, pero cualquier que de poder de hechizos también estará bien. En este jefe la prioridad, a mi parecer, es : Crítico, poder de hechizos, celeridad. Y nada de regeneración de maná, no sirve de nada...
Otro apunte es el tema del rezo de sombras. No lo pongáis. Las nubes de saronita se basan en daño de sombra y si las resistis no podréis regenerar maná. Y desde luego no hagáis lo que yo hago, que es ponerse el escudo y meterse en la mancha verde, porque el escudo absorverá el daño, no regenareis maná y cuando se caiga el escudo, recibiréis el daño acumulado, como unos 12000 de vida menos, por ejemplo. Vamos, que es muerte segura.
Por eso en este post descargaré todas mis ansias asesinas explicándoos como podéis sacarle más partido a vuestro sacerdote sanador en este jefe.
Para empezar, ese jodio largarto, condenado, como lo odiamos todo el gremio de healers, nos da un bonito regalo: regeneración de maná 0. Sí, 0, y 0 es cero. Olvidáos de tonterías de pociones de maná y de malignos de sombras, ni pidáis estimular, porque nada, 0. Lo único que funciona son habilidades de DPS que a nosotros ni nos vienen ni nos van, porque no nos afectan.
¿Y cómo podemos hacer para enfrentarnos a él?
Es evidente que este jefe puede hacerse con talentos de disciplina o talentos de sagrado, es indiferente, pero recomiendo para aquellos que estén empezando o quieran guardar maná por algún motivo que hagan el jefe en modo disciplina. Además, debéis llevar puesto el equipo que os dé más intelecto.
Tenéis que tener en cuenta que en este jefe prácticamente sólo hay que sanar al tanque y en contadas ocasiones, así que a parte del maná, yo recomiendo el crítico en este jefe, ya que la celeridad aquí no hará nada ya que se trata de que se tenga la sanación preparada para entrar en el momento que el tanque reciba el daño.
Unido al tema del maná, tenéis la posibilidad de usar para este jefe el Frasco de Sabiduría destilada o el elixir de pensamientos fluidos junto al que decidáis - uno que dé crítico o poder de hechizos es una buena combinación con el elixir de intelecto. De comida recomiendo la medusa picante, ya que da crítico, pero cualquier que de poder de hechizos también estará bien. En este jefe la prioridad, a mi parecer, es : Crítico, poder de hechizos, celeridad. Y nada de regeneración de maná, no sirve de nada...
Otro apunte es el tema del rezo de sombras. No lo pongáis. Las nubes de saronita se basan en daño de sombra y si las resistis no podréis regenerar maná. Y desde luego no hagáis lo que yo hago, que es ponerse el escudo y meterse en la mancha verde, porque el escudo absorverá el daño, no regenareis maná y cuando se caiga el escudo, recibiréis el daño acumulado, como unos 12000 de vida menos, por ejemplo. Vamos, que es muerte segura.
Hablando de escudos, un muy buen uso que podéis darle a Palabra de poder: escudo, y que os agradecerá vuestro maná, es colocaros sobre la mancha negra que deja el fragor de sombras, ya que el este conjuro, a pesar de ser de la escuela sagrado, no es considerado como hechizo de sanación, por lo que el bufo negativo no afectará. Al contrario, crearás un escudo que absorverá más daño que el escudo normal. Sin embargo, hay que tener bastante cuidado, puesto que si tu raid opta por la estrategia de colocar a los healers a melee, deberás esperar a que no sea tu turno de sanación o salir con infinito cuidado en busca de un resto de fragor. Y cuidado también, porque al alejarte del jefe, puedes recibir el fragor de sombras... y eso tampoco es lo que se busca. Si se puede bien, sino, también bien.
Una habilidad que puede ayudar a dar un porcentaje de maná, y que lo rellena en un 12%, es himno de Esperanza, y que tenemos que tener en cuenta, porque funciona, pero a medias.
Sin duda alguna recomiendo hacer este jefe en las primeras ocasiones como sacerdote Disciplina, simplemente por el hecho de que se tiene más maná. A fin de cuentas, es lo que acaba primando aquí. Y no olvidéis usar el enfoque interno, suele ayudar y es bueno tenerlo siempre en coldown.